Congreso Eucaristíco Arquidiocesano (CEA2016)
viernes, 29 de octubre de 2010
Vocero vaticano asegura que los santos “son la cara más bella de la Iglesia”
Seguidamente, el sacerdote comentó que la "Iglesia propone solemnemente en los Santos modelos de vida cristiana, pero lo hace reconociendo aquello que el pueblo ha ya entendido: que ciertas personas encarnan el Evangelio con una ejemplaridad extraordinaria, y así se convierten para quienes los encuentran, en amigos espirituales, fantásticas guías para llegar al amor de Dios, a la fe, a la esperanza".
Las canonizaciones, prosiguió el vocero Vaticano, "son el reconocimiento que el espíritu de Dios sopla en personas comunes como Mary y el hermano André, y produce frutos de virtud que son fuente de consuelo y luz para muchísimos otros. Algunos santos son reconocidos solemnemente; la gran mayoría no se hacen universalmente famosos pero difunden igualmente entorno a ellos esperanza y amor".
"Esta es la cara más bella de la Iglesia. En la Iglesia todo lo demás está al servicio de los hombres y mujeres de cada país y condición para que puedan caminar hacia Dios sobre los caminos de la santidad. Aprendamos a ver a la Iglesia en esta perspectiva y a renovarla continuamente comenzando por nosotros mismos", concluyó.
Entrega de víveres en las comunidades de Hueyapan y Díaz Covarrubias, Veracruz
Ante tal emergencia, por parte de las Hermanas de la Providencia, surgió la intención de reunir víveres para donarlos a las familias afectadas. Para poder transportar todo lo recolectado, la empresa DADUGA donó el flete de un tráiler con capacidad de 50 toneladas, y por ello se intensificó la campaña a favor de los damnificados, la cual se realizó en los colegios de las Hermanas de la Providencia, en un periodo aproximado de 15 días.
Se estableció como fecha para la entrega de la despensa, el jueves 14 de octubre y ocurrió que, para el lunes de esa misma semana, el tráiler se encontraba a más de un cuarto de su capacidad. Luego, la preocupación no se hizo esperar, ya que las comunidades de Hueyapan y Díaz Covarrubias habían sido contactadas y se encontraban esperando la ayuda material. Para ello, se pidió el auxilio a personas y a movimientos como: Monseñor Pedro Agustín Rivera Díaz, Rector de la Antigua Basílica de Guadalupe; al noticiero Matutino Express; al Movimiento Familiar Cristiano de Tulancingo; y a Caritas de la Arquidiócesis de México y Querétaro, quienes estuvieron dispuestos a apoyar ésta iniciativa.
Gracias a Dios, el tráiler partió con más de la tercera parte de su capacidad. La ruta consistió en ir a Querétaro a recoger parte de los víveres que ya se habían recolectado, y de ahí fuimos rumbo a Díaz Covarrubias y luego a Hueyapan, ubicados en la zona de los Tuxtlas.
En el trayecto nos encontramos con algunos contratiempos, como las fallas ocurridas con las camionetas que transportaban al equipo que habríamos de entregar la ayuda, además nos llovió durante el camino, y hubo otros pequeños destalles que demoraron la entrega.
Pese a ello, el día viernes, ya en la tarde-noche, se entregaron las despensas a los sacerdotes Cristin (de la comunidad Díaz Covarrubias) y al P. Martín (de Hueyapan), e incluso, los mismos pobladores nos ayudaron a descargar los víveres que les llevamos.
Después, fuimos a hacer un recorrido y nos percatamos que, a pesar de que ya han pasado varios días desde aquél desastre, las personas aún tienen mucha necesidad material y espiritual, puesto que los pobladores se han quedado sin nada, todo se lo llevó la corriente, la cual creció hasta 30 metros, provocando que el río se abriera hasta casi un kilómetro, destruyendo a su paso uno de los puentes colgantes que unía a las comunidades, y que ahora se encuentran incomunicadas, lo que hace aún más difícil que reciban ayuda.
Emocionalmente las personas dan gracias a Dios de que aún tienen vida, pero al mismo tiempo se encuentran invadidos por la tristeza, ya que al preguntarles del momento en que tuvieron que salir corriendo de sus casas para salvar sus vidas, o del cómo los rescataron del río que venía hacia ellos, comienzan a llorar, reflejando así su dolor.
Queremos dar las gracias a todos los que de una u otra menara apoyaron ésta causa, aunque fuese con una pequeña aportación, y así de igual manera les invitamos a continuar apoyando a nuestros hermanos, ya que ellos nos necesitan. Su ayuda económica y en especie, es demasiado valiosa, pero la espiritual es más fuerte e importante. Oremos entonces por ellos, para que con el tiempo, reenciendan la llama de su fe e incrementen su espíritu. También pidamos por nosotros, para que podamos tener un corazón generoso.
De igual manera agradecemos a las autoridades que nos apoyaron a lo largo del camino, dispensándonos el cobro de las casetas, también agradecemos la atención de los soldados y los oficiales.
Por último, solicitamos a las autoridades administrativas de estos lugares, que realmente apoyen a los que padecen necesidades, y que no lucren, haciendo proselitismo con la desgracia de muchos.
Fraternalmente:
Hna. Irma Barrientos Villavicencio
jueves, 28 de octubre de 2010
¿Quién fue san Judas Tadeo?
El nombre Judas es una palabra hebrea que significa “alabanzas sean dadas a Dios”, y Tadeo quiere decir “valiente para proclamar su fe”.
El apóstol Judas Tadeo, es presentado en los Evangelios como el "hermano de Santiago", probablemente de Santiago el Menor.
Es muy importante distinguirle de Judas Iscariote, que fue el hombre que traicionó a Jesús y lo vendió por unas monedas, mientras que Judas Tadeo era más bien alguien íntimamente relacionado con Jesucristo, pues era su primo.
Respecto al parentesco de Jesús con san Judas Tadeo, hay que aclarar que en la época en que ambos vivieron, los judíos decían "hermano" a todo aquél que fuera un pariente cercano, como es en el caso de los primos, al igual que como sucedió con Juan el Bautista.
San Judas Tadeo es el autor de la epístola que lleva su nombre, donde se presenta a sí mismo como servidor de Jesucristo y hermano de Santiago, la cual aparece en la enumeración de los Apóstoles en el libro de los Hechos, ocupando el último lugar.
Según la tradición recogida por el martirologio romano desde el siglo VIII, el apóstol predicó en Mesopotamia y luego marchó con san Simón a Persia, donde ambos sufrieron el martirio en la ciudad de Suanis, después de que visitaron juntos varios lugares, siempre predicando la Palabra de Dios, por ésta razón a estos dos santos se les celebra el mismo día, es decir, el 28 de octubre.
San Simón y San Judas Tadeo fueron llamados por Jesús para formar parte del grupo de sus 12 apóstoles, y recibieron al Espíritu Santo en forma de lenguas de fuego el día de Pentecostés, además presenciaron los milagros de Jesús en Galilea y Judea y escucharon sus múltiples sermones. También le vieron cuando resucitó y presenciaron su gloriosa ascensión al cielo.
En sus revelaciones, Santa Brígida cuenta que el Señor Jesús la exhortó a que cuando necesitara conseguir ciertos favores, los pidiera por medio del apóstol Judas. Así podemos explicar la propagada devoción que se tiene a éste santo, dentro de la piedad popular.
Actualmente, en la ciudad de México y en otras partes de la República, existen muchos fieles que gracias a la intercesión de Judas Tadeo ante Dios, han conseguido numerosos favores, como empleo, casa u otros beneficios. Lo lamentable es que la gente, ante el desconocimiento de quién es en verdad san Judas Tadeo, lo confunden con Judas Iscariote y lo toman como el patrono de la gente que se dedica a ir en contra de la ley de Dios, de aquellos que roban, matan o violan, y acuden ante él para pedirle ayuda en la realización de sus fechorías. San Judas Tadeo, por el contrario es el patrono de las causas difíciles y no de las malas causas.
Por otra parte, también me he percatado que en muchas parroquias, la imagen de san Judas Tadeo es más buscada que incluso la imagen de Jesús vivo y presente en la Eucaristía. Por ello, me atevo a decir que la fe que la gente pone en el santo, es quizá´mayor que la fe puesta en Dios, de quien procede la vida y otras bendiciones, y es Él mismo, quien permite a los santos, nos ayuden en las dificultades que atravesamos, ya que el santo, no actúa por sí mismo, sino por obra de Dios.
Oración a San Judas Tadeo:
Concédenos Señor, por medio de tu santo apóstol San Judas Tadeo, la gracia de dedicar nuestra vida, nuestras cualidades y nuestros esfuerzos, a hacerte conocer y amar, y al final de nuestras vidas, lograr como él, un lugar junto a ti en el cielo.
Santo de la semana
30 de Octubre
En el año 1533 nació en Segovia, España, un niño que fue llamado Alonso, cuyo nombre significa “pronto para hacer el bien”. Un día, el Beato Pedro Fabro y otros jesuitas, fueron a predicar a Segovia y se hospedaron en la casa de los padres del ahora santo, Alonso Rodríguez, quien más tarde fue preparado para la primera comunión por el beato.
Cuando Alonso tenía catorce años, junto con su hermano, fue a estudiar al colegio jesuita de Alcalá, pero al morir su padre, quien era un importante comerciante, tuvo que regresar para ayudar a su madre en el negocio familiar. Alonso Rodríguez se casó tiempo después, a los veintiséis años, y su madre le encargó el negocio, el cual empeoraba cada vez más.
El santo fue bendecido con un hijo, pero cuando su esposa iba a dar a luz al segundo bebé, ambos fallecieron, y al poco tiempo, también perdió a su madre. El dolor de la muerte de sus seres queridos se convirtió para el viudo, en una oportunidad de abrirse a la gracia para hacer en todo la voluntad de Dios. Hasta entonces, había cumplido como cristiano pero ahora Dios le llamaba a más. Decidió vender su negocio, quedándose con lo suficiente para mantener a su hijo, con quien se fue a vivir a la casa de sus dos hermanas solteras, Antonia y Juliana, que eran muy piadosas.
Las hermanas del santo le enseñaron a meditar, y luego, san Alonso oraba por la mañana y por la tarde, dedicándose a reflexionar sobre los misterios del rosario. De esta manera Dios le pudo demostrar la pobreza de su vida pasada a la luz de Cristo.
A raíz de una visión de la felicidad del cielo, hizo una confesión general. Desde entonces, empezó a practicar duras mortificaciones y a confesarse y comulgar una vez por semana. Algunos años más tarde, murió también su único hijo y Alonso, que se encontraba invadido por el dolor y la tristeza, experimentó un gran consuelo al comprender que con la muerte, su hijo se había librado del peligro de ofender a Dios.
Siendo viudo, el santo solicitó a los padres jesuitas, que lo aceptaran en su comunidad, pero no fue admitido debido a que ya bordeaba los 40 años de edad, y tampoco tenía estudios en ciencias ni en humanidades. Sin embargo, el superior cambió de parecer, y lo aceptó como hermano lego, y sería ésta la profesión que lo llevaría a la santidad.
Los superiores decidieron enviarlo a la isla de Mallorca como portero del colegio de los jesuitas de Montesión, y de todos los amigos que San Alonso tuvo mientras fue portero, el más santo e importante de todos fue San Pedro Claver. Este gran apóstol vivió tres años con San Alonso en aquella casa, y una noche, por revelación divina, San Alonso supo que su amigo estaría destinado a la evangelización en Sudamérica. Al poco tiempo, San Pedro Claver viajó a Colombia, donde bautizó a más de 300,000 esclavos negros en Cartagena, además se dedicó a protegerlos y velar por ellos.
El santo portero también sufrió terribles ataques en su cuerpo; de vez en cuando, por ejemplo, sufría de sequedades espantosas durante la oración. Y, por otra parte, Dios le otorgó el don de la curación.
El 29 de octubre de 1617 sintiéndose sumamente lleno de dolores y de angustias, al recibir la Sagrada Comunión, inmediatamente se llenó de paz y de alegría, quedando como en éxtasis. Dos días estuvo casi sin sentido y el 31 de octubre despertó, besó con toda emoción su crucifijo y después de exclamar en voz alta: "Jesús, Jesús, Jesús", expiró.
San Alonso Rodríguez fue declarado Venerable en 1626. En 1633 fue nombrado Santo Patrono de Mallorca, siendo beatificado en 1825. Su canonización tuvo lugar el 6 septiembre de 1887.
Papa Benedicto XVI reflexiona sobre vida de la co-patrona de Europa
Brígida, proclamada co-patrona de Europa por Juan Pablo II, nació en Finster, Suecia. En su vida se puede distinguir dos periodos. El primero de ellos, estuvo caracterizado por su condición de mujer felizmente casada y madre de ocho hijos. Se inició entonces en el estudio de la Sagrada Escritura y adoptó como norma de vida, junto a su esposo, la Regla de los Terciarios franciscanos. Practicó también generosamente las obras de caridad y fundó un hospital.
Ésta etapa, señaló el Papa, "nos ayuda a apreciar lo que hoy podríamos llamar una verdadera ‘espiritualidad conyugal’: los esposos cristianos pueden seguir un camino de santidad, sostenidos por la gracia del Sacramento del Matrimonio. ¡Que el Espíritu del Señor suscite también hoy en día la santidad de los esposos cristianos, para mostrar al mundo la belleza del matrimonio vivido de acuerdo con los valores del Evangelio: el amor, la ternura, la ayuda mutua, la fecundidad en la generación y educación de los hijos, la apertura y la solidaridad hacia el mundo, la participación en la vida de la Iglesia!".
Luego, el Pontífice explicó que cuando Brígida enviudó, comenzó el segundo período de su vida. Renunció a otra boda para profundizar "la unión con el Señor mediante la oración, la penitencia y las obras de caridad", y "después de distribuir sus bienes a los pobres, se estableció en el monasterio cisterciense de Alvastra, sin acceder a la consagración religiosa".
Benedicto XVI manifestó también, que esta Santa estaba firmemente convencida de que "todos los carismas están destinados a edificar la Iglesia”, y agregó que santa Brígida, “se caracterizaba siempre por su actitud de respeto y de fidelidad plena al Magisterio de la Iglesia, en particular al Sucesor de Pedro".
Más adelante, el Papa recordó que en 1349 Brígida peregrinó a Roma para participar en el Jubileo de 1350 y pedir al Papa que aprobase la regla de fundación de la orden religiosa que quería dedicar al Santísimo Salvador, compuesta por monjes y monjas. En el año de 1373 falleció y fue canonizada en 1391 por Bonifacio IX. Su santidad, caracterizada por múltiples dones y experiencias, "la convierte en una figura destacada en la historia europea" ya que "muestra cómo el cristianismo ha impregnado profundamente la vida de todos los pueblos de este continente".
Para concluir su mensaje, el Papa Benedicto XVI, solicitó la intercesión de la santa para que "Europa se alimente siempre de sus raíces cristianas".
Cardenal Rivera destaca que "la Iglesia es esencialmente misionera"
Seguidamente, el Arzobispo Primado de México manifestó que en ésta fecha se nos recuerda que llevar la Misión es “ayudar a que cada uno acepte en su vida a Dios”, y explicó que “la acción misionera consiste en facilitar la aceptación personal” del compromiso que se hace con Dios por medio de la fe.
En su homilía, el Prelado aseguró que “la Iglesia es signo para todos los pueblos porque Dios quiere que todos los hombres se salven y lleguen al conocimiento de la verdad” y agregó que “la Iglesia es esencialmente misionera”, según el mandato del Señor, quien envió a sus discípulos a predicar por todas las naciones.
Más adelante, el Cardenal Rivera comentó que todo cristiano debe hacer suyas las angustias y temores de los hombres, para anunciarles el mensaje de salvación, con la palabra, el ejemplo y la ayuda. “Debe anunciar que Dios es Padre de todos, que todos somos hermanos y que Dios quiere que todos se salven. No puede limitar el sentido de la misión a una ayuda material de desarrollo”, señaló.
En su reflexión, el Prelado compartió la realidad de los misioneros, quienes muchas veces se sacrifican para anunciar el Evangelio en todo el mundo, “las Iglesias en territorios de misión son ya, a su vez, Iglesias misioneras; las jóvenes Iglesias son vida hoy y la esperanza del mañana”, prosiguió.
Más tarde declaró que en nuestra Arquidiócesis de México “hacen falta muchos misioneros, para que los hombres, alejados de Dios, lo descubran y lo acepten”, y explicó que una prioridad pastoral que se asumió desde el Sínodo de los Obispos, es llegar a los “alejados” del influjo del Evangelio y que para cumplir esta misión, “debemos continuar formando laicos para acciones específicas”.
Después de hacer un recorrido histórico de los orígenes de nuestra fe, el Cardenal expresó que “hace cinco siglos de Europa llego a nuestro continente el Evangelio. Ahora es el momento de que desde nuestros pueblos llegue a otros que están lejos la buena noticia de la salvación en Jesucristo”.
El Arzobispo comentó también, que Jesús envió a sus discípulos a salvar almas, pero también a salvar a hombres y mujeres, “que tienen cuerpo, hambre, sed, frío, enfermedades y necesidades fundamentales que satisfacer para ser personas dignas. La Iglesia para cumplir su tarea misionera además de palabras debe llevar a los más necesitados, obras concretas que hablen del amor de Dios. La Iglesia tiene plena conciencia de que su tarea misionera está íntimamente ligada a la promoción humana”.
El Cardenal Rivera Carrera concluyó su homilía reconociendo que “este día y siempre debemos tener conciencia de que debemos sostener a nuestros misioneros con la oración constante, la práctica de nuestra fe y con nuestros bienes materiales. La fe en la Iglesia circula como en vasos comunicantes: Si somos una comunidad viva, comprometida, practicante, nuestros hermanos que salen a anunciar la Buena Noticia se sentirán sostenidos y apoyados. Es cierto que no todos podemos salir, pero también es cierto que todos podemos hacer algo para que el Evangelio sea conocido”.
Historia de la semana
La vida no es más que un viaje por tren, donde hay subidas y bajadas, accidentes y sorpresas; momentos agradables en algunos casos y profundas tristezas en otros.
Desde que nacemos nos subimos en éste tren, ahí nos encontramos con algunas personas, y solemos pensar que ellas siempre estarán con nosotros en éste viaje.
Tristemente, la verdad es otra, pues ellos se bajarán en alguna estación y nos dejarán continuar el camino sin su presencia, pero ello no resta el que nuevas personas se suban y nos acompañen durante el viaje.
De las personas que toman este tren, habrá los que lo hagan como un simple paseo, otros que encontrarán solamente tristeza en el viaje, y habrá otros que circulando por él, estarán siempre listos en ayudar a quien lo necesite.
Muchos al bajar, dejan una añoranza permanente; otros pasan tan desapercibidos que ni siquiera nos damos cuenta que desocuparon el asiento.
También hay ocasiones en que tomamos un asiento y después decidimos cambiarnos de lugar para alejarnos de la persona sentada a nuestro lado y cuando decidimos regresar a ese lugar, nos damos cuenta de que el asiento ha sido ocupado por alguien más.
En fin, éste viaje es así, lleno de desafíos, sueños, fantasías, esperas y despedidas, pero jamás hay regresos. Entonces sólo nos queda hacer el viaje, de la mejor manera posible, procurando relacionarnos bien con los demás pasajeros y disfrutando de ellos, durante los momentos que podamos compartir en el trayecto.
El gran misterio es que no sabremos jamás en qué estación bajaremos, mucho menos donde bajarán nuestros compañeros, ni siquiera el que está sentado en el asiento de al lado.
Mejor pensemos en hacer que nuestra estancia en este tren sea tranquila, que haya valido la pena, y que hayamos podido dejar algo bueno para los demás pasajeros que compartieron conmigo aunque sea un breve lapso del trayecto en éste tren.
Hagamos tanto para que cuando llegue el momento de desembarcar, nuestro asiento vacío deje añoranza y lindos recuerdos a los que permanezcan en el viaje, y así en cada parada de cada estación, nuestro recuerdo perdure para siempre.
miércoles, 20 de octubre de 2010
Exposición Floral en el Atrio de la Basílica de Guadalupe
La Antigua Basílica de Guadalupe, actual Templo Expiatorio a Cristo Rey de la Arquidiócesis de México, le invita a la inauguración de la:
Exposición Floral del Bicentenario
“Las Flores Mensajeras del Cielo”
Que se llevará a cabo el viernes 29 de octubre a las 10:00 hrs. En el Atrio de la Basílica de Guadalupe.
Inaugurará la exposición Mons. Pedro Agustín Rivera Díaz, Rector de la Antigua Basílica de Guadalupe.
“Flores Mensajeras del Cielo” en la Basílica de Guadalupe
Del 29 al 31 de octubre, el Atrio de la Basílica de Guadalupe se embellecerá, por tercer año consecutivo, con flores “Mensajeras del Cielo” que formarán parte de una exposición floral.
A través de esta muestra, organizada por personas de buena voluntad pertenecientes a clubes florales, florerías y floristas, se contará la historia de las apariciones de la Virgen de Guadalupe en el Tepeyac, contenidas en el Nican Mopohua, relato en náhuatl de esta aparición Mariana.
La finalidad de este evento es favorecer, de una manera original, la evangelización de los visitantes, además de apoyar la restauración de la Antigua Basílica de Guadalupe que durante años estuvo cerrada y que en el 2000 reabrió sus puertas como Templo Expiatorio a Cristo Rey, mismo que está cumpliendo una década de Adoración Eucarística.
Para los indígenas, las flores representaban la presencia de Dios: “El indio concebía la verdad, la bondad, la valía del hombre, como "lo arraigado": Una cosa es cierta o es buena si tiene buena raíz. Por lo tanto, una bella flor es la evidencia de una buena raíz y la promesa de un buen fruto. Por eso nuestros antepasados indios las amaban apasionadamente: nada había para ellos más bello, nada más divino, nada más excelso como don de Dios que las flores, que son preciosas, alegran el corazón, cantan y comunican la belleza de Dios...”. “La máxima prueba de cortesía india, de deferencia, de amor hacia alguien, era darle personalmente flores...De modo que darle Ella personalmente las flores y encomendarle: "Hijito queridísimo, estas diferentes flores son la prueba, la señal que le llevarás al Obispo" era ya tal muestra de aprecio que no hacía falta que añadiera nada más”. (Comentarios al Nican Mopohua de Mons. José Luis Guerrero “LAS FLORES”, Números 122-126 y Números 134-142/ www.virgendeguadalupe.org.mx)
El horario para visitar esta bella exposición será de las 10:00 a las 17:00 hrs. La entrada es libre, sólo se pide un donativo voluntario. Invitan: La Antigua Basílica de Guadalupe, la Arquidiócesis Primada de México y la I.N. Basílica de Guadalupe.
Informes: www.culturaenlaantiguabasilica.com Tel. 5781-2278
Texto del Nican Mopohua donde se habla de las flores
LAS FLORES
126.- Allí verás que están sembradas diversas flores: Córtalas, reúnelas, ponlas juntas. Luego bájalas acá, aquí ante mí tráemelas.
127.- Y acto continuo, Juan Diego subió al cerrito. 128.- Y al alcanzar la cumbre, quedó mudo de asombro ante las variadas, excelentes, maravillosas flores, todas extendidas, cuajadas de capullos reventones, cuando todavía no era su tiempo de darse. 129.- Porque en verdad entonces las heladas son muy fuertes. 130.- Su perfume era intenso, y el rocío de la noche como que las cuajaba de perlas preciosas.
131.- En seguida se puso a cortarlas, todas absolutamente las juntó, llenó con ellas el hueco de su tilma. 132.- Y conste que la cúspide del cerrito para nada es lugar donde se den flores, porque lo que hay en abundancia son riscos, abrojos, gran cantidad de espinas, de nopales, de mezquites. 133.- y si algunas hierbezuelas se dan, entonces era el mes de diciembre, en que todo lo devora, lo aniquila el hielo.
134.- Bajó en seguida trayendo a la Reina del Cielo las diversas flores que le había ido a cortar, 135.- y Ella, al verlas, tuvo la afabilidad de tomarlas en sus manecitas, 136.- y volvió amablemente a colocárselas en el hueco de su tilma. Se dignó decirle:
137.- <<-Hijito queridísimo, estas diferentes flores son la prueba, la señal que le llevarás al Obispo.
Cardenal Rivera invita a combatir "las tinieblas" que ensombrecen camino del cristiano
Más adelante el Arzobispo Primado de México comentó, con relación al Evangelio, que hoy en día existen muchos jueces que deciden hacer justicia a los necesitados, pero movidos únicamente por el deseo de ya no ser molestados. Al respecto de dicha situación, el Cardenal recordó que estamos enfrentándonos a “las tinieblas que parecen ensombrecer el camino del Cristiano”, entre las que podemos destacar, “el comercio de drogas, el lavado de ganancias ilícitas, la corrupción en cualquier ambiente, el terror de la violencia, el armamentismo, la discriminación racial, las desigualdades entre los grupos sociales, la irrazonable destrucción de la naturaleza. Estos pecados manifiestan una profunda crisis debido a la pérdida del sentido de Dios y la ausencia de los principios morales que deben regir la vida de todo hombre”.
“Es urgente la necesidad de restablecer un ambiente social de fraternidad, tolerancia, de justicia, en el que las instituciones cumplan con su deber, en el que las leyes justas se apliquen sin miramientos ni concesiones, en que el imperio de la ley venga avalado por principios éticos y por el bien que produce a la persona y a la sociedad y no por ideologías o intereses partidarios o proselitistas y mucho menos por revanchas o fobias”, declaró el Arzobispo.
En su reflexión, el Cardenal aseguró que “la oración, ese levantar el alma hacia Dios, ese dialogo con Aquel que nos ama, se convierte en el modo como la luz de Cristo vence a las tinieblas, pues Él en su presencia Eucarística se nos da como luz y vida, como pan y vino transfigurados. Así la Eucaristía aumenta las virtudes y promueve todos los dones espirituales, a fin de que los cristianos nos manifestemos con la fuerza que vence a las tinieblas de nuestro interior y del ambiente”.
Por último, comentó que “la oración confiada, insistente, filial a nuestro Padre Celestial la hemos de hacer siempre por medio de Jesucristo, con Él y en Él. Orar sin desfallecer, de día y de noche. Con ella se alcanzan muchas gracias”, y prosiguió, comentando que en muchas ocasiones, “los católicos nos acercamos a Dios y le buscamos en la oración sólo cuando tenemos necesidades o algo nos aflige”, sin embargo, sugirió que hay que buscar constantemente a Dios y sobre todo en la Eucaristía, ya que es ahí donde el Salvador ha dejado su presencia, siendo que “solamente en nuestra relación con Jesús Eucaristía encuentran respuesta nuestras preocupaciones y necesidades, nuestras penas y dolores. Y también solamente en Él nuestras ilusiones y alegrías alcanzan su satisfacción profunda”.
Historia de la semana
Hace varios meses, un joven llamado Juan invitó a su amiga Marisa a tomar un café. Durante la charla, el joven mostró a su amiga, un rostro en el que reflejaba todas las angustias y problemas que traía encima.
Cuando Marisa le preguntó qué le sucedía, el deprimido joven le comentó que todo en su vida estaba mal, que no aguantaba la presión de la escuela, que no le iba bien en el trabajo, que el dinero no le alcanzaba, que su novia no lo entendía, que no sabía cuál era su vocación… no había nada que rescatar.
Repentinamente, Marisa tomó su cartera y sacó un billete, luego lo puso en la mesa y preguntó:
-Juan, ¿quieres éste billete?
Un poco confundido, el joven le miró y luego contestó:
-Claro Marisa...son $100, ¿quién no los querría?
Entonces Marisa tomó el billete en uno de sus puños y lo arrugó hasta hacerlo un pequeño bollo. Después le mostró el billete a su amigo y volvió a preguntarle:
-¿Aún quieres el billete?
Aún más confundido, el joven respondió:
-Marisa, no sé qué pensabas al arrugar el billete, pero no importa, siguen siendo $100. Claro que los acepto si me los regalas.
Al escuchar la respuesta de Juan, Marisa desdobló el billete, lo tiró al piso y lo restregó con su pie en el suelo. Lo volvió a levantar, pero el billete estaba sucio y tenía algunas marcas. Por tercera vez mostró el billete a su amigo y una vez más le preguntó que si lo quería, a lo que Juan contestó:
-Mira Marisa, sigo sin entender lo que pretendes, pero ese es un billete de $100 y mientras no lo rompas, conserva su valor. Entonces, sí lo quiero.
Marisa miró a su amigo y le explicó:
-Juan, con esto te he querido enseñar que aunque a veces algo no salga como tú quieres, aunque la vida te arrugue o te pisotee, sigues siendo tan valioso como al principio. Debes preguntarte cuánto vales, sin importar lo golpeado o roto que estés.
Al ver que su amigo estaba reflexionando lo que había querido enseñarle, Marisa puso el billete arrugado sobre la mesa, le sonrió y le dijo:
-Toma Juan, guárdalo para que cuando te sientas desanimado, te acuerdes de cuánto vales.
Papa Benedicto XVI recuerda testimonio de ejercicio de justicia e igualdad
El Santo Padre explicó que Santa Isabel nació en 1207 y tras vivir los cuatro primeros años en la corte húngara fue entregada en matrimonio a Luis de Turingia. "A pesar de que el noviazgo se decidió por motivos políticos, entre los dos jóvenes nació un amor sincero, animado por la fe y por el deseo de hacer la voluntad de Dios", y agregó que la santa "se comportaba del mismo modo ante Dios y ante sus súbditos".
"Es un verdadero ejemplo para todos los que desempeñan un papel de guía: el ejercicio de la autoridad, en todos los niveles, se debe vivir como un servicio a la justicia y a la caridad, en la búsqueda constante del bien común", manifestó el Papa, para luego resaltar que santa Isabel "practicaba asiduamente las obras de misericordia".
Con respecto a su matrimonio, el Vicario de Cristo señaló que éste "fue muy feliz: Isabel ayudaba a su marido a elevar sus cualidades humanas a nivel sobrenatural, y él, a su vez, protegía a su esposa en su generosidad con los pobres y en sus prácticas religiosas. Es un claro testimonio de cómo la fe y el amor a Dios y al prójimo fortalecen la vida familiar y hacen aún más profunda la unión matrimonial".
En su mensaje, el Pontífice también recordó que Santa Isabel afrontó las pruebas de su vida, "con gran fe, paciencia y dedicación a Dios". Y añadió que "Isabel pasó los tres últimos años de su vida en el hospital que fundó, al servicio de los enfermos, velando a los moribundos. Trataba siempre de realizar los servicios más humildes y los trabajos más repugnantes. Se convirtió en lo que podríamos llamar una mujer consagrada en medio del mundo (soror in saeculo) y formó con otras amigas, vestidas con hábitos grises, una comunidad religiosa. No es una casualidad que sea patrona de la Tercera Orden Regular de San Francisco y de la Orden Franciscana Secular".
Por último, el Papa Benedicto XVI indicó que la santa falleció en noviembre de 1231, tras padecer de fiebre, y que debido a los muchos testimonios sobre su vida de santidad, en sólo cuatro años, el Papa Gregorio IX la proclamó santa, y el mismo año fue consagrada la hermosa iglesia construida en su honor en Marburgo.
Después de comentar que "en la figura de Santa Isabel vemos cómo la fe, la amistad con Cristo, crean el sentido de la justicia, de la igualdad de todos, de los derechos de los demás y crean el amor, la caridad. De esta caridad nace también la esperanza, la certeza de que somos amados por Cristo y de que su amor nos espera y nos capacita para imitarle y ver a Cristo en los demás", deseó que "la figura de Santa Isabel de Hungría, modelo de caridad, nos inspire también a nosotros a un amor intenso hacia Dios y hacia el prójimo. Muchas gracias".
Santo de la semana
23 de Octubre
San Juan de Capistrano, quien es considerado uno de los predicadores más famosos que ha tenido la Iglesia Católica, nació en Capistrano, en la región montañosa de Italia, en el año 1386.
Fue un estudiante sumamente consagrado a sus deberes y llegó a ser abogado, juez y gobernador de Perugia. Tras caer preso a causa de una guerra civil, el santo reflexionó sobre su actitud en la vida, dándose cuenta que prefería conseguir la santidad, en vez de obtener dinero y fama. Por ésta razón decidió ingresar a la orden franciscana, a los 33 años fue ordenado sacerdote, y durante su preparación, tuvo por maestro de predicación y por guía espiritual al gran San Bernardino de Siena.
Al poco tiempo, ante su deseo de salir a evangelizar, formó grupos de entre seis y ocho religiosos, quienes se distribuyeron primero por toda Italia, y después por los demás países de Europa, y así, durante 40 años, el santo italiano logró viajar por todo el continente para ir predicando, y en éste tiempo logró enormes éxitos espirituales.
San Juan tenía mucha habilidad para la diplomacia; era sabio, prudente, y medía muy bien sus juicios y sus palabras, ya que, gracias a sus anteriores cargos como juez y gobernador, sabía tratar muy bien a las personas. Esto originó que cuatro Pontífices (Martín V, Eugenio IV, Nicolás V y Calixto III) lo emplearan como embajador en muchas y muy delicadas misiones diplomáticas. En tres ocasiones, los Sumos Pontífices le ofrecieron nombrarlo obispo de importantes ciudades, pero él prefirió seguir siendo un humilde predicador.
La Comunidad Franciscana lo eligió dos veces como Vicario General, y el santo aprovechó este altísimo cargo para tratar de reformar la vida religiosa de los franciscanos, llegando a conseguir que en toda Europa ésta Orden religiosa llegara a un gran fervor, no sin antes sortear una serie de dificultades y obstáculos.
Se cuenta que en 1453, cuando los turcos musulmanes se habían apoderado de Constantinopla, con el deseo de invadir toda Europa, San Juan fue a Hungría y recorrió toda la nación predicando al pueblo, incitándolo a salir entusiasta en defensa de su santa religión. Para el momento del enfrentamiento, San Juan empleó como armas, la oración, la penitencia y la fuerza irresistible de su predicación.
Tres años después, el santo enfermó gravemente y falleció el 23 de octubre de 1456. Luego de su muerte, se reunieron los apuntes de los estudios que hizo para preparar sus sermones, con los que se sumaron 17 volúmenes.
martes, 19 de octubre de 2010
Noticias Internacionales de la Iglesia Católica
En la carta que el Papa Benedicto XVI dirigió a los seminaristas de todo el mundo, la cual envió el pasado 18 de octubre, por la conclusión del Año Sacerdotal, señaló que hoy en día hay mucha gente que “de una u otra forma, piensa que el sacerdocio católico no es una "profesión" con futuro, sino que pertenece más bien al pasado”, y a manera de exhortación, agregó: “Vosotros, queridos amigos, habéis decidido entrar en el seminario y, por tanto, os habéis puesto en camino hacia el ministerio sacerdotal en la Iglesia católica, en contra de estas objeciones y opiniones. Habéis hecho bien”.
Luego prosiguió su mensaje, destacando que “donde el hombre ya no percibe a Dios, la vida se queda vacía; todo es insuficiente. El hombre busca después refugio en el alcohol o en la violencia, que cada vez amenaza más a la juventud”. Y así señaló a los seminaristas que su tarea es acercar a Dios a los hombres, pues “Dios está vivo, y necesita hombres que vivan para Él y que lo lleven a los demás. Sí, tiene sentido ser sacerdote: el mundo, mientras exista, necesita sacerdotes y pastores, hoy, mañana y siempre”.
“Quien quiera ser sacerdote debe ser sobre todo un "hombre de Dios", como lo describe san Pablo”, reiteró el Santo Padre, ya que, el sacerdote “es el mensajero de Dios entre los hombres. Quiere llevarlos a Dios, y que así crezca la comunión entre ellos. Por esto, queridos amigos, es tan importante que aprendáis a vivir en contacto permanente con Dios”.
A cerca de su estancia en el seminario, el Vicario de Cristo aseguró que “el tiempo en el seminario es también, y sobre todo, tiempo de estudio. La fe cristiana tiene una dimensión racional e intelectual esencial. Sin esta dimensión no sería ella misma”, prosiguió el Pontífice en su mensaje, e insistió que “una de las tareas principales de los años de seminario es capacitaros”.
“Los años de seminario deben ser también un periodo de maduración humana. Para el sacerdote, que deberá acompañar a otros en el camino de la vida y hasta el momento de la muerte, es importante que haya conseguido un equilibrio justo entre corazón y mente, razón y sentimiento, cuerpo y alma, y que sea humanamente íntegro”, comentó. Además recordó que en éste lugar “uno aprende con los otros y de los otros. En la convivencia, quizás a veces difícil, debéis asimilar la generosidad y la tolerancia, no simplemente soportándoos mutuamente, sino enriqueciéndoos unos a otros, de modo que cada uno pueda aportar sus cualidades particulares al conjunto, mientras todos servís a la misma Iglesia, al mismo Señor”.
Después invitó a los futuros sacerdotes a estudiar con tesón y a aprovechad los años de estudio, de los cuales dijo: “No os arrepentiréis”. Y tras tocar otros temas, el Papa Benedicto XVI agradeció la vocación de aquellos sacerdotes que “forjados por su fe, que dan testimonio de cómo en este estado, en la vida celibataria, se puede vivir una humanidad auténtica, pura y madura”.
“Queridos seminaristas, con estas líneas he querido mostraros lo mucho que pienso en vosotros, especialmente en estos tiempos difíciles, y lo cerca que os tengo en la oración”, puntualizó, y concluyó su mensaje, asegurando que “Confío vuestro camino de preparación al sacerdocio a la maternal protección de María Santísima, cuya casa fue escuela de bien y de gracia. A todos os bendiga Dios omnipotente, Padre, Hijo y Espíritu Santo”.
En Misa con mineros rescatados, Obispo agradece ejemplo de fortaleza
En una Misa de acción de gracias, celebrada este 18 de octubre en el campamento Esperanza, en las afueras de la mina San José, el Vicepresidente de la Conferencia Episcopal de Chile, Mons. Gonzalo Duarte, resaltó la importancia vital de la familia dentro de la sociedad.
En su homilía dirigida a 20 de los mineros rescatados y sus parientes, Mons. Duarte agradeció el ejemplo de fortaleza, solidaridad, de unidad y de ganas de vivir de los mineros y de las familias, destacando que "la familia es el mejor lugar para nacer, para crecer, para envejecer y para morir".
Al mismo tiempo insistió lo importante que fue que estas familias permanecieran en el campamento durante los 70 días que duró el encierro de los 33 mineros. Luego, les exhortó a confiar en la justicia de Dios, que vela por casa persona, y agregó que había que agradecer la respuesta de Dios a nuestras súplicas. "Dios actúa por medio del hombre y la mujer", dijo, mencionando la inteligencia del hombre y de la mujer, hechos "a su imagen y semejanza".
El Obispo también agradeció a los medios de comunicación y a quienes "no salen en la tele, y que nunca saldrán, a los que nadie quiere entrevistar", a todas las personas que anónimamente trabajaron por armar y sostener el campamento, a los que vinieron de otros lugares para ofrecer apoyo, a los que dejaron sus ocupaciones diarias para dar parte de su tiempo acompañando a las familias.
Con ocasión de la celebración del mes del Rosario, Mons. José Luis Mollaghan, Arzobispo de Rosario (Argentina), ciudad que lleva este nombre en honor a la oración mariana, recordó este 18 de octubre, que el rezo mariano acompaña la vida y dificultades de todos los fieles.
En la carta pastoral titulada "El Rosario es la oración mariana del discípulo, que nos invita a anunciar a Jesucristo", el Prelado explicó que "el Rosario es una oración de contemplación de la vida de Jesús, a lo largo del itinerario de la salvación, recordando y meditando los misterios de alegría, de luz, de dolor y de gloria".
Al recordar la exhortación del Papa Benedicto XVI a rezar durante el mes de octubre el Santo Rosario, el Arzobispo argentino manifestó que en esta oración mariana los fieles laicos pueden encontrar "una pausa en su vida ajetreada y una fuente de verdadera paz para cada uno y para la familia", ya que con él, Nuestra Madre intercede por nuestras necesidades.
Más adelante aseguró que los misterios meditados en el Santo Rosario, muestran a los fieles, que Jesús es el centro de la salvación e invitan a reflexionar sobre la realidad que vive el hombre de hoy. Y reiteró que "desde la Encarnación hasta la Cruz y en la gloria de la Resurrección, contemplamos la participación íntima de María en los misterios de Cristo y así también en nuestra vida, entretejida de momentos de alegría y tristeza, de sombras y luces, de contrariedades y esperanzas. Por ello la gracia colma nuestros corazones, suscitando al rezarlo el deseo de un cambio de vida".
Mons. Mollaghan concluyó indicando que el Rosario impulsa a los fieles a descubrir la vocación misionera porque "si rezar el Rosario nos ayuda a vivir como cristianos y discípulos de Jesús, también nos impulsa a descubrir por María la vocación misionera. Justamente, al profundizar en la vida de Jesús, surge una y otra vez el llamado a vivir lo que rezamos y por ello a anunciar su Reino y las obras de Dios".
El Padre Joseph Michael Langford M.C., quien fundó junto a la Madre Teresa de Calcuta la rama sacerdotal de los Misioneros de la Caridad, falleció la madrugada del pasado 15 de octubre, en la Arquidiócesis de Tijuana, donde residió en sus últimos años.
El sacerdote nació el 25 de junio de 1951 en Ohio, Estados Unidos. Creció en San Diego, California, y tras descubrir su vocación religiosa estudió filosofía y teología en el Angelicum de Roma, ciudad en la que fue ordenado sacerdote el 25 de marzo de 1978.
En 1963 la Madre Teresa de Calcuta abrió la rama masculina de los Hermanos Misioneros de la Caridad, y entre 1976 y 1979 fundó otras ramas de religiosos contemplativos. El entonces seminarista Joseph Langford, trabajaba como voluntario en un albergue de las Misioneras de la Caridad para indigentes cerca del Coliseo romano. Para 1983, compartió con la Madre Teresa su deseo de que existiera una rama sacerdotal de los Misioneros de la Caridad. Pronto tenían unos 30 sacerdotes en la congregación desempeñando su ministerio en las calles, las barracas, y en las afueras de las grandes ciudades.
El Padre Langford llegó a Tijuana por primera vez en 1988. Entre 1996 y 1998 fue el Superior General de los Padres Misioneros de la Caridad, y de 1998 a 1999 fue Vicario Pastoral en esta Arquidiócesis. Desde 1999 fue Superior local en Roma y tres años después Vicario Pastoral en Tijuana. El 15 de septiembre de 2009 publicó el libro sobre la Beata Teresa de Calcuta “El fuego secreto de la Madre Teresa”.
miércoles, 13 de octubre de 2010
Invitación a Taller de oración con Mons. Pedro A. Rivera
“APRENDIENDO A ADORAR
A JESÚS EUCARISTÍA”
Expositor Mons. Pedro Agustín Rivera Díaz
Templo Expiatorio a Cristo Rey,
Antigua Basílica de Guadalupe
23 de octubre de 2010
9:00 a 13:30 hrs.
Cuota de recuperación $ 20.00.
Solicita mayores informes a través de nuestro correo electrónico:
Centro de Espiritualidad de Familia Eucarística (CEFE)
familia_eucaristica@yahoo.com.mx
Otras invitaciones:
Les invitamos a que asistan a un concierto del Coro de la Iglesia Anglicana de Christ Church Parish, el próximo 24 de octubre a las 17:30 hrs. en la Antigua Basílica de Guadalupe. La entrada será con boleto gratuito, mismo que hay que solicitar al correo electrónico:
Asistan a la Exposición: "LAS FLORES MENSAJERAS DEL CIELO"
Exposición Floral del Bicentenario
La Antigua Basílica, que durante años estuvo cerrada, nuevamente abrió sus puertas en el año 2000 como Templo Expiatorio a Cristo Rey, de la Arquidiócesis de México y la estamos restaurando. Para ayudar al rescate de este patrimonio de la Nación y de la Iglesia Católica que cumple una década de Adoración Eucarística, se realizará esta exposición.
Atrio de la Basílica de Guadalupe
Del 29 al 31 de octubre, 10:00 a 17:00 hrs.
Entrada libre. Asiste con tu familia. Donativo voluntario.
Noticias de la semana
Carmen Durán
Durante dos días, se llevó a cabo en el Templo Expiatorio a Cristo Rey, Antigua Basílica de Guadalupe, el Congreso Guadalupano 2010, el cual llevó por título “Guadalupe, conciencia de nación”.
La mañana del jueves 7 de octubre, Mons. Christophe Pierre, Nuncio Apostólico en México y Mons. Diego Monroy Ponce, rector de la Basílica de Guadalupe, inauguraron el evento. Antes de iniciar con las conferencias, ambos realizaron una oración, luego, el Nuncio impartió la bendición a todos los asistentes y a quienes lo presenciaron a través de Internet.
El primer expositor fue el Dr. Iván Escamilla, quien habló de las “Posiciones del clero y religiosos de la Nueva España ante el acontecimiento independiente”, mientras que en el primer bloque de conferencias, se abordaron los siguientes temas: “Los seminarios y los estudios teológicos hacia la época de Independencia”, “Sermones e impresos católicos novohispanos en el arranque del siglo XIX” (por el Dr. Pbro. Gustavo Watson) y “Pensamiento cristiano ilustrado de los laicos en los albores del siglo XIX” (por la Mtra. Guadalupe Gómez Aguado).
Para el segundo bloque de conferencias participaron: Mtra. Alicia Bazarte con el tema “Defensa y lealtad, sobre los capitales de las cofradías al inicio de la Independencia”; R.P. Fidel González Fernández con “Guadalupe, unidad y religión. Guadalupe, pulso y corazón de un pueblo”; y el Mtro. Guillermo Macías cuyo tema se tituló “Rescate del ethos cristiano, sembrando en las raíces del acontecimiento de la Independencia”. Al término de éste día, se realizó un concierto en el que participó la Maestra Lidia Guerberof.
Para el viernes 8, se realizaron otras conferencias, cuyos temas tratados fueron: “Valoración global del movimiento de independencia y revolución mexicana: ¿Qué hacer en el país?, recuento de daños y logros” (por el Dr. Miguel Romero); “Búsqueda de una motivación nacional para el futuro” (por el Dr. Jorge Eugenio Traslosheros); y “La religiosidad en México y Santa María de Guadalupe, en los inicios del III Milenio” (por el Pbro. Dr. Mario Ángel Flores).
Terminada ésta parte del evento, se presentó nuevamente la Carta Pastoral de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), que realizaron los obispos mexicanos con motivo del Bicentenario de nuestra Independencia, la cual fue reseñada por Mons. Alberto Suárez Inda, Arzobispo de Morelia.
Dicho Congreso tuvo como objetivo “ofrecer al pueblo mexicano una visión de fe, para la celebración del Bicentenario de nuestra Independencia Nacional, apegada a la verdad histórica, guadalupana, eclesial y pastoral, que nos ayude a reconocer a Santa María de Guadalupe en el corazón de nuestra identidad nacional”.
Recuerdan a San Josemaría Escrivá fundador del Opus Dei
Carmen Durán
La tarde del pasado 6 de octubre, en el Templo Expiatorio a Cristo Rey, Antigua Basílica de Guadalupe, se realizó una misa en honor a San Josemaría Escrivá de Balaguer, quien es el fundador del Opus Dei, en su aniversario de canonización, que se llevó a cabo el 6 de octubre del 2002, por el Papa Juan Pablo II. En ella, se recordó que el santo “tuvo una especial devoción a Santa María de Guadalupe” y que la visitó en éste recinto “para pedirle con mucha fe por la Iglesia”.
La celebración fue presidida por Mons. Francisco Ugarte, Vicario del Opus Dei en México. Durante su homilía, el sacerdote explicó que san Josemaría realizó una novena frente a la Virgen de Guadalupe, en mayo de 1970, cuando vino a nuestro país.
“Fueron varias horas, que estuvo cada día, hablando con Nuestra Madre Santísima y rezándole con una piedad profunda y llena de cariño”, agregó, para después comentar que el actual Prelado del Opus Dei también estuvo presente con él, en esos días, y que gracias a que tomó nota de lo que san Josemaría decía a la Virgen “hemos podido contar ahora con textos que recuerdan aquellos momentos de intimidad del hijo con la Madre”.
En su mensaje, Mons. Ugarte indicó que la visita de san Josemaría a la Morenita del Tepeyac, era para confiarle su dolor: “Madre, me duele la Iglesia”, ya que en aquella época se vivieron varias adversidades.
En la novena a la Virgen Morena, san Josemaría Escrivá de Balaguer manifestó: “estamos muy seguros de ti y de todo lo que nos has dado. Estoy muy seguro de mis hijas y de mis hijos, y del camino firme que tu Hijo nos ha marcado. Ruega por nosotros los pecadores”.
En su oración, el santo también pidió a la Madre de Dios, que no abandonara a la Iglesia ni al Opus Dei, y solicitó su intercesión “porque confío en ella con todas las fuerzas de mi alma”. Además aseguró que la misión del Opus Dei es servir a la Iglesia, “servir a tu Hijo, y por Él y con Él, y con tu ayuda, a todas las almas”.
La homilía de Mons. Francisco Ugarte concluyó con la recitación de las palabras con las que el santo se despidió de la Señora del Tepeyac, el último día de la novena: “Quiero agradecer vivamente a mi Madre Santísima del cielo, la alegría inmensa de éstas horas de tertulia que hemos pasado en su compañía, con la imagen suya tan cerca. Han sido unos días tan humanos y tan sobrenaturales”.
Al final de la celebración se llevó a cabo la bendición de la placa conmemorativa que hoy se encuentra en éste recinto. El Ing. Adrián Galván, también quien estuvo presente en aquella novena, hizo la develación de la imagen.
San Josemaría nació en España en el año 1902 y fue ordenado sacerdote en 1925. El 2 de octubre de 1928 fundó el Opus Dei, y falleció en Roma en 1975.
Papa Benedicto XVI invita a “transformarse en el amor y en los sufrimientos de Cristo crucificado”
En 1285 Francisco de Asís se le apareció en una visión, y le pidió la aconsejara para hacer una confesión general de sus pecados. Tres años después, fallece toda su familia y Ángela vende todos sus bienes para entrar en 1291 en la Tercera Orden Franciscana. Al principio de su recorrido espiritual, la beata sintió miedo del infierno, debido a sus pecados.
Al respecto de éste temor, el Santo Padre explicó que "corresponde al tipo de fe que Ángela tenía en el momento de su conversión; una fe todavía pobre de caridad, es decir del amor de Dios. El arrepentimiento, ese miedo al infierno y la penitencia le abren la perspectiva del doloroso camino de la cruz que la llevará al camino del amor".
Seguidamente el Pontífice señaló que "Ángela siente que tiene que dar algo a Dios para reparar sus pecados, pero lentamente comprende que no tiene nada que darle, que no es nada ante Él y entiende que no será su voluntad la que le dará el amor de Dios porque ésta puede darle solamente su ‘nada’, su ‘no amor’. Poco a poco en su camino místico entenderá ‘profundamente la realidad central: lo que la salvará de su indignidad y del infierno no será su ‘unión con Dios’, ni su posesión de la ‘verdad’, sino Jesús crucificado, su amor. Identificarse, transformarse en el amor y en los sufrimientos de Cristo crucificado".
En su mensaje, el Papa destacó que la conversión de la santa maduró cuando el perdón de Dios se presentó “a su alma como el don gratuito del amor del Padre, fuente de amor”, logrando gracias al Crucificado, “el paso de la conversión a la experiencia mística, de lo que se puede expresar a lo inexpresable".
"Toda su experiencia mística es, por lo tanto, tender a una perfecta semejanza con Él, mediante purificaciones y transformaciones siempre más profundas y radicales. Esa identificación significa también vivir lo que Jesús vivió: pobreza, desprecio, dolor. Un camino altísimo, cuyo secreto es la oración constante", manifestó el Vicario de Cristo.
Al despedirse, el Papa Benedicto XVI deseó "que la Beata Ángela de Foligno nos ayude a comprender que la verdadera felicidad consiste en la amistad con Cristo, crucificado por amor nuestro. A su divina bondad sigo encomendando con esperanza a los mineros de la región de Atacama, en Chile. Muchas gracias y que Dios os bendiga".
martes, 12 de octubre de 2010
Santo de la semana
15 de Octubre
El 28 de marzo de 1515, en Ávila, nació Teresa Sánchez Cepeda Dávila y Ahumada. La niña fue educada por su tierna madre y por su piadoso padre, quien era amante de los libros. A la muerte de su madre y después de que su hermana mayor contrajera matrimonio, Teresa fue enviada con las monjas Agustinas en Ávila, sin embargo, luego de 18 meses, la santa tuvo que abandonar la orden debido a una enfermedad.
Durante éste tiempo estuvo bajo el cuidado de su padre y de sus tíos. En una ocasión, tuvo la oportunidad de leer las Cartas de San Jerónimo, mismas que le ayudaron a decidirse por la vida religiosa, ya que sintió deseos de escoger el camino más seguro. Al no obtener el consentimiento de su padre, en noviembre de 1535, con mucho dolor, huyó de la casa de su padre e ingresó en el Convento Carmelita de la Encarnación, en Ávila. Después de un tiempo su padre cedió a la voluntad de la santa, y así Teresa tomó el hábito.
Al año siguiente de su profesión la religiosa enfermó gravemente, y aunque logró mejorar, ya no gozó de una buena salud. En estos años de sufrimientos, Teresa comenzó a practicar la oración mental, luego entabló una profunda relación con Dios al tener "visiones intelectuales y locuciones", y también fue alentada y fortalecida para poder sobrellevar sus pruebas.
Cuando Teresa llevaba ya 25 años de vida religiosa en el convento de la Encarnación de Avila, emprendió la tarea de fundar una comunidad más reducida y reformada, ya que en esos años, los conventos solían estar demasiado saturados. La santa estableció la más estricta clausura y el silencio casi perpetuo. En 1567, el superior general de los carmelitas, Juan Bautista Rubio (Rossi), visitó el convento de Avila y quedó muy satisfecho con el trabajo realizado allí por santa Teresa, y por ésta razón le concedió plenos poderes para fundar otros conventos del mismo tipo, e incluso tuvo el permiso para fundar dos conventos de frailes reformados (carmelitas contemplativos).
Con el paso del tiempo, santa Teresa se dedicó a realizar varios escritos, en ellos se percibe su espíritu de oración, la manera en que lo practicaba y los frutos que le produjo. Precisamente en la época en que la santa estaba consagrada a la difícil tarea de fundar conventos de carmelitas reformadas, escribió varias obras, en las que prescindiendo de su contenido y naturaleza, dan testimonio de su vigor, laboriosidad y capacidad de recogimiento.
Algunas de sus obras son: "Camino de Perfección", "Fundaciones" y "Castillo Interior". Santa Teresa murió en los brazos de la Beata Ana el 4 de octubre de 1582. Su canonización se realizó en 1622.
Poesía de Santa Teresa de Ávila:
NADA TE TURBE
Nada te turbe,
Nada te espante,
todo se pasa,
Dios no se muda;
la paciencia
todo lo alcanza;
quien a Dios tiene
nada le falta:
Sólo Dios basta.
Eleva tu pensamiento,
al cielo sube,
por nada te acongojes,
nada te turbe.
A Jesucristo sigue
con pecho grande,
y, venga lo que venga,
nada te espante.
¿Ves la gloria del mundo?
Es gloria vana;
nada tiene de estable,
todo se pasa.
Aspira a lo celeste,
que siempre dura;
fiel y rico en promesas,
Dios no se muda.
Ámala cual merece
bondad inmensa;
pero no hay amor fino
sin la paciencia.
Confianza y fe viva
mantenga el alma,
que quien cree y espera
todo lo alcanza.
Del infierno acosado
aunque se viere,
burlará sus furores
quien a Dios tiene.
Vénganle desamparos,
cruces, desgracias;
siendo Dios tu tesoro
nada te falta.
Id, pues, bienes del mundo;
id dichas vanas;
aunque todo lo pierda,
sólo Dios basta.
Cardenal Rivera invita a "permanecer en acción de gracias"
Antes del rezo del Santo Rosario, el Prelado dirigió un mensaje a los fieles, y en él manifestó su agradecimiento por las muestras de afecto y cariño, y de manera especial, agradeció las oraciones dirigidas a Dios para pedir por él, las cuales consideró “una bendición”. Luego agregó que en la oración encontramos fuerzas para afrontar los problemas, dificultades o pruebas que nos vienen “en el caminar por ésta vida”.
En su reflexión, el Arzobispo Primado de México exhortó a los fieles, “a permanecer en acción de gracias” no solamente por él, sino también “por el Papa, por toda la Iglesia, por todo fiel cristiano que continuamente necesita de la oración de sus hermanos para poder seguir adelante en el seguimiento de Jesucristo”. Poco más tarde, recordó que Jesucristo ha encomendado a la Iglesia una triple misión, la cual está encabezada por el obispo, y que consta en “predicar la palabra, celebrar los sacramentos y promover a la comunidad cristiana en la caridad”.
"El Señor, cuando nos llama a predicar no nos manda a predicar cualquier palabra, sino la palabra del Evangelio, su palabra y por eso el pastor continuamente debe cuidar de que sea la palabra de Cristo, la que Él proclame, la que proclamen sus sacerdotes, la que se proclame en los colegios, la que se proclame en cada una de las casas de ustedes. Por eso siempre debe estar vigilante para que sea la doctrina cristiana, la doctrina del Evangelio", declaró.
El Cardenal reconoció que para lograr dicha tarea, es necesario apoyarse en la fe y el amor, e indicó que el pastor requiere del respaldo de sus fieles e invitó a su vez, para que los fieles sientan la cercanía con su pastor. Además explicó que cuando hacemos alguna obra como comunidad, “es la Iglesia de Cristo la que se convierte en luz para las demás gentes. Brilla la luz de Cristo ante los demás, porque brilla el amor de Dios cuando la comunidad cristiana se organiza para la caridad, para salir al encuentro de los más necesitados”.
Antes de concluir su mensaje, el Cardenal Rivera Carrera aseguró que si estamos unidos con María y en la oración, “nuestra plegaria siempre obtendrá el Espíritu de Dios sobre nosotros”.
"La oración nuestra siempre tiene que estar centrada en Jesucristo nuestro Señor, sólo Él es nuestro Salvador. Sólo Él ha entregado su vida por nosotros, sólo Él es el que puede llevarnos hasta la casa del Padre. Pero Cristo llegó a nosotros por medio de María, y por eso siempre que acudimos a Jesucristo, tenemos presente a Santa María, nuestra madre, y sobre todo la sentimos cercana bajo la advocación de Guadalupe, porque sabemos que siempre somos escuchados si lo hacemos junto con María", señaló.
Por último, el Prelado deseó que el Señor bendiga “a nuestra Iglesia, y a nuestros hermanos que en estos momentos están en grandes necesidades. Que esta oración de esta tarde, también a ellos los fortalezca y nos fortaleza a nosotros en nuestro caminar, para ser discípulos y misioneros de Jesucristo".
lunes, 11 de octubre de 2010
Dedican Rosario Viviente a Cardenal Norberto Rivera
Con el lema “15 años de ser luz de la Ciudad”, como cada año, se realizó en el Estadio Azul el Rosario Viviente de la Arquidiócesis de México, y en ésta ocasión fue dedicado al Emmo. Sr. Cardenal Norberto Rivera Carrera, por los XV años que lleva al frente de ésta Arquidiócesis y sus XXV años de Vida Episcopal. Entre porras y aplausos, se le demostró el cariño que todos los laicos tienen hacia él.
En el evento, el matrimonio de Alejandro Vázquez Rodríguez y Esperanza Gálvez de Vázquez, pertenecientes a la COMOLAI (Comisión de Movimientos Laicales de la Arquidiócesis de México) felicitaron, a nombre de todos los presentes, al Cardenal Rivera. De igual manera, el joven Manuel Alejandro Vega, miembro de Familia Eucarística, quien fue el compositor de la canción “Eres Luz”, tema del Rosario Viviente 2010, dedicó dicha canción al Prelado, la cual escribió para él.
Luego, el Arzobispo Primado de México, agradeció las muestras de fe y cariño, que todos los fieles han tenido hacia él. Además les invitó a superar las pruebas y dificultades de la vida, con la ayuda de la oración, con el encuentro diario de Jesucristo y con María, quien siempre está atenta a ellos: “los exhorto a permanecer en acción de gracias, no solamente con un servidor, sino con el Papa, con toda la iglesia, de todo fiel Cristiano que continuamente necesita de la oración de sus hermanos para poder seguir adelante en el seguimiento de Jesucristo”.
También comentó que los Obispos tienen que predicar la fe, y ser testimonio para cada uno de los fieles: “cuando el Señor nos manda predicar, no es con cualquier palabra, sino con la palabra del Evangelio, su palabra; y por eso el pastor debe mirar que continuamente sea la palabra de Cristo, la que él proclame, la que proclamen sus sacerdotes, la que se proclame en los colegios, en la casa de cada uno de ustedes; por eso siempre debe de estar vigilante para que sea la doctrina cristiana la doctrina del Evangelio”.
El Cardenal concluyó su mensaje exhortando a que la oración de los fieles esté centrada y dirigida al Señor Jesucristo, ya que sólo Él es quien nos puede llevar a la casa del Padre, quien nos recuerda que Cristo llegó a nosotros por medio de María, y por esa razón debemos sentirnos cercanos a Ella, así como los discípulos estaban a su alrededor. “Que el Señor bendiga estas oraciones que hacen por su Santidad, por un servidor, y bendiga sobre todo a nuestra Iglesia y a nuestros hermanos que en estos momentos están en grandes necesidades, que esta oración les fortalezca y nos fortalezca a nosotros en nuestro caminar para ser discípulos y misioneros de Jesucristo”, puntualizó.
Al finalizar el rezo de los misterios, que en este año fueron los gozosos, el Cardenal Norberto Rivera presidió la procesión con el Santísimo, y luego se leyó una oración, escrita para todos los Sacerdotes y el Cardenal, en donde se pide a Jesús y a María por su protección.
ORA POR EL EMMO. SR CARDENAL NORBERTO RIVERA CARRERA.
El pasado 9 de octubre, convocados por la Comisión de Eventos Evangelizadores Multitudinarios, cerca de veinte mil asistentes al Rosario Viviente, se unieron en oración por el Emmo. Cardenal Norberto Rivera Carrera, Arzobispo Primado de México.
Los signos que acompañaron este Rosario fueron “el escudo del Emmo. Sr. Cardenal”, “el escudo de la Arquidiócesis de México” y la “imagen de santa María de Guadalupe”.
Noticias Internacionales de la Iglesia Católica
La mañana del 11 de octubre, al presidir la primera Congregación General del Sínodo de los Obispos de Medio Oriente, el Papa Benedicto XVI reconoció el papel que tiene la Virgen María en la Iglesia, y recordó que el 11 de octubre de 1962 el Papa Juan XXIII, inauguró el Concilio Vaticano, ya que en aquel entonces se celebraba en esta fecha la fiesta de la Maternidad divina de María, que actualmente se festeja el 1 de enero.
Poco después, el Santo Padre explicó que la fiesta de la Madre de Dios, encierra un misterio difícil de entender: "¿Cómo es posible? Dios es eterno, es el Creador. Nosotros somos creaturas, estamos en el tiempo: ¿cómo es posible que una persona humana sea Madre de Dios, del Eterno, dado que estamos en el tiempo y todos somos creaturas?".
Luego aclaró que el Concilio de Éfeso entendió que María es verdaderamente la Theotokos, la Madre de Dios: "Dios no se ha quedado en sí, ha salido de sí y se ha unido tan radicalmente con Jesús que este hombre Jesús es Dios, y si hablamos de Él podemos siempre hablar de Dios". Y añadió que con éste gran acontecimiento, "estamos en relación con Dios y Él realmente ha creado una relación con nosotros. En aquel momento Dios quería nacer de una mujer y ser siempre Él mismo".
Centrándose en su reflexión, el Pontífice destacó el testimonio de los mártires, quienes a lo largo de distintas épocas, han participado en la lucha contra el mal. "Se realiza en los diversos periodos de la historia en modos siempre nuevos, también hoy, en este momento, en el que Cristo, el único Hijo de Dios, debe nacer para el mundo con la caída de los dioses, con el dolor, el martirio de los que testimonian", indicó.
Durante su mensaje, el Vicario de Cristo insistió que algunas de estas "falsas divinidades" a las que hizo referencia, son "los capitales anónimos que esclavizan al hombre, un poder anónimo al que sirven los hombres, por el que son atormentados los hombres hasta a veces ser asesinados". Otro de ellos, son "las ideologías terroristas. Aparentemente en nombre de Dios se da la violencia, pero no es Dios”. También comprenden “la droga, este poder que, como una bestia voraz, extiende sus manos sobre la tierra y destruye”. Otro más es “el modo de vivir difundido por la opinión pública: hoy se hace así, el matrimonio ya no cuenta, la castidad no es más una virtud".
Más adelante, el Papa Benedicto aseguró que "estas ideologías que dominan, que se imponen con la fuerza”, deben ser vencidas con el “dolor de los santos, en el dolor de los creyentes, de la Madre Iglesia de la que somos parte". Al respecto, el Vicario de Cristo comentó que en el capítulo 12 del Apocalipsis se narra una lucha, en la que un dragón genera un gran río de agua para ahogar a una mujer, pero la tierra absorbe esta corriente y no le hace daño.
En Sumo Pontífice consideró que el río, “son estas corrientes que dominan todo y que quieren hacer desaparecer la fe de la Iglesia, que no parece tener lugar ante la fuerza de estas corrientes que se imponen como la única racionalidad, como el único modo de vivir. Y la tierra que absorbe estas corrientes es la fe de los sencillos, que no se deja abrumar por estos ríos y salva a la Madre y al Hijo".
Ya casi al final de su mensaje, el Santo Padre aseguró que la fe "es la fuerza de la Iglesia".
Este 11 de octubre, el Papa Benedicto XVI nombró a Mons. Cesare Nosiglia, hasta ahora Arzobispo de Vicenza, como nuevo Arzobispo de Turín. Con este nombramiento el Prelado toma el lugar del Cardenal Severino Poletto, quien presentó su renuncia al gobierno pastoral de la Arquidiócesis de Turín debido a su avanzada edad, según lo establece el Código de Derecho Canónico, y con ello, Mons. Cesare Nosiglia se convierte en el nuevo custodio de la Sábana Santa que está en esta arquidiócesis italiana.
El nuevo Arzobispo de Turín nació el 5 de octubre de 1944 en Rossiglione, en la diócesis de Acqui, provincia de Génova. Fue ordenado sacerdote el 29 de junio de 1968. Fue designado Obispo Auxiliar de Roma el 6 de julio de 1991 y recibió la ordenación episcopal el 14 de diciembre de ese mismo año. El 6 de octubre de 2003 fue transferido a la diócesis de Vicenza.
Obispo argentino invita a dar testimonio de fe y ser agradecidos con Dios
En su homilía dominical del pasado 10 de octubre, el Obispo de Puerto Iguazú (Argentina), Mons. Raúl Martorell, recordó que "todos los hombres están llamados a la salvación y esto es lo que Jesús en la Sinagoga quiere enseñarnos. La salvación no está reservada solamente a los hijos de Israel, sino que es un don ofrecido a todos los hombres".
En su reflexión, el obispo argentino se refirió al Evangelio, en cuya lectura se describió el momento en que Jesús sana a varios leprosos y que sólo uno de ellos acude a agradecerle. Al respecto, Mons. Martorell indicó que éste último "no era un miembro del Pueblo de Dios, sino un extranjero. Los otros nueve curados no vuelven a agradecer a Dios, quizá porque como miembros del Pueblo de Dios, se sentían casi con el derecho de ser curados por Jesús".
"El extranjero, que considera que no tienen ningún derecho, se siente indigno del favor del Dios de Israel en nombre de quien Jesús hizo el milagro y vuelve para agradecer. Esta actitud de agradecimiento lo dispone a recibir un don aún mayor: la fe y la salvación. Por eso es que Jesús le dice: ‘levántate y vete en paz, tu fe te ha salvado’", explicó.
Más adelante, el sacerdote señaló que "la vida de fe debe ser vivida por aquellos que han recibido la palabra, e imitar a Cristo, en una vida de sufrimiento si fuera necesario, viviendo en la fe la cruz y los sufrimientos humanos que de ella se derivan, el rechazo, la indiferencia, las burlas y la soledad".
"Durante toda nuestra vida recibimos dones y regalos de Dios. El agradecimiento y la fidelidad son la respuesta adecuada y el testimonio de fe que estamos llamados a dar los cristianos de hoy en medio de un mundo indiferente, que no reconoce ni agradece a Dios por tantos bienes que sin merecerlo también recibe", destacó.
Mons. Raúl Martorell, concluyó invitando a "que el testimonio de fe de tantos hombres y mujeres abnegados, como el de Juan Pablo II o de la Madre Teresa de Calcuta en tiempos recientes, nos impulsen a vivir y a esparcir el amor de Dios entre todos los hombres".
Durante la Misa celebrada en la Basílica de San Pedro el pasado 10 de octubre, con la que se dio inicio a la tercera jornada de trabajo del Congreso de Prensa Católica, el Cardenal Tarcisio Bertone, Secretario de Estado Vaticano, recordó la misión de los comunicadores.
El Prelado reflexionó en torno al Evangelio de San Lucas y destacó el valor de la oración en la vida de la comunidad, porque "quien aprende a orar, aprende a bien vivir". Poco después citó la labor de los comunicadores, quienes deben ser constructores de verdad, con ello, el Secretario de Estado manifestó que los medios de prensa de la Iglesia deben ser capaces de transmitir incisivamente el mensaje del Evangelio, y que ello responde a una exigencia de la fe de hoy.