17 de Febrero
En un período de dos años, siete jóvenes florentinos que eran miembros de las familias más importantes de la ciudad, se asociaron a la Confraternidad de la Santísima Virgen, siendo conocidos popularmente, como los "Ludesi" o los alabadores.
Esto ocurrió en una época en que Florencia estaba acosada por alborotos políticos, y perturbada por la herejía. A pesar de algunas dificultades, los jóvenes, por revelación divina, decidieron alejarse del mundo y tras conseguir la aprobación del Obispo, se mudaron a las afueras de la ciudad, en una casa llamada "La Carmazia", donde llevaron una vida de penitencia y oración.
Los continuos visitantes florentinos comenzaron a distraerlos y así optaron por retirarse a las laderas desiertas del Monte Senario, donde construyeron un sencilla Iglesia y una ermita, en la que llevaban una vida de austeridades casi increíble.
Alrededor del año 1233, por una nueva manifestación de la Virgen, cuando se encontraban en oración profunda, los jóvenes decidieron formar la orden de Siervos de María, vistiendo un hábito negro y siguiendo la regla de San Agustín. A partir de 1240, fueron conocidos como Siervos de María o Servitas, quienes rápidamente extendieron su labor apostólica por toda Florencia, llegando a fundar varios conventos e iglesias.El Papa León XIII, que el 15 de enero de 1888 elevó al honor de los altares a los Siete fundadores, índica que sus nombres fueron: Bonfilio, Amadeo, Bonayunta, Maneto, Sosteño, Hugo y Alejo.
La Orden de los Frailes Siervos de María está presente hoy en los cinco continentes con unos 1000 frailes, religiosas y monjas Siervas de María. Desde Noviembre del 2001, el General de toda la orden es el P. Fr. Ángel M. Ruiz Garnica, originario de León, Guanajuato.En nuestro país tienen comunidades en: la Ciudad de México, Xochimilco, Aguascalientes, Celaya, Guadalajara, Ciudad Juárez y otras en El Paso Texas y en Colombia.
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