Este
domingo 4 de marzo, el Papa Benedicto XVI afirmó que los cristianos debemos
aprender de lo hecho, dicho y sufrido por el Señor Jesús, porque sólo así
aprenderemos el arte de vivir, que el mismo Jesús nos muestra.
Durante
la homilía de la Misa celebrada en la parroquia de SanJuan Bautista de la
Salle, al sur de Roma (Italia), el Santo Padre reflexionó sobre el pasaje
evangélico de la transfiguración del Señor, en el que explicó que “Como los
tres apóstoles del Evangelio, también nosotros tenemos necesidad de subir al
monte de la transfiguración para recibir la luz de Dios, para que su Rostro
ilumine nuestro rostro”.
Además
el Vicario de Cristo indicó que en la oración personal y comunitaria, “encontramos
al Señor no como una idea, como una propuesta moral, sino como una Persona que
quiere entrar en relación con nosotros, que quiere ser amigo y quiere renovar
nuestra vida para convertirla como la suya”. Fue así como exhortó a la
comunidad creyente, principalmente a los matrimonios jóvenes y a los niños, a
no esperar “que otros os vengan a traer mensajes distintos que no conducen a la
verdad, sino haceros vosotros mismos misioneros de Cristo allí donde vuestros
hermanos viven, trabajan, estudian, o solo transcurren el tiempo libre”.
Por
último, el Pontífice recordó que “Asumiendo sobre sí toda consecuencia del mal
y del pecado, Jesús resucitará el tercer día como vencedor de la muerte y del
Maligno. La Cuaresma nos prepara a participar personalmente a este gran
misterio de la fe, que celebraremos con el Triduo de la pasión, muerte y
resurrección de Cristo”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario