lunes, 9 de agosto de 2010

Noticias de la Iglesia Católica

Cardenal Rivera ordena a dos nuevos Obispos

El pasado viernes 30 de Julio a las 12:00hrs., el Cardenal Norberto Rivera presidió en la Basílica de Guadalupe, la misa de ordenación de dos nuevos obispos auxiliares, Mons. Andrés Vargas Peña y Mons. Adolfo Miguel Castaño Fonseca, quienes en presencia de los obispos auxiliares y eméritos de la Arquidiócesis de México, el Cabildo de Guadalupe, sacerdotes, religiosos y religiosas, así como de los files laicos que acudieron al templo, recibieron su ordenación por manos del Sr. Cardenal y del Nuncio Apostólico en nuestro país, frente al altar de la Santísima Virgen de Guadalupe.

Para poder recibir su nuevo cargo, el celebrante principal, en este caso el Sr. Cardenal pidió los tres requisitos: constancia de elección, mandato apostólico y que a través de aplausos el pueblo de Dios diera su aceptación.

Más tarde, durante su homilía, el Prelado les dio la bienvenida como Maestros y Doctores de la fe, para que vallan y proclamen la Palabra de Cristo, también recordó que son llamados a la gran tarea de la conversión y a alimentar la fe en cada Católico. El Arzobispo Primado de México insistió que todos estamos llamados a ser misioneros y discípulos de Jesucristo. Les dio las gracias por aceptar y unir esfuerzos con los presbíteros, hermanas consagradas y laicos comprometidos, para así todos ser hombres y mujeres de bien, y declaró que debemos sabernos amados personalmente por Dios Nuestro Padre, quien envío a su Hijo para nuestra salvación.

También indicó que el sacerdocio que recibieron ese día, los capacita para ser promotores y animadores de la oración, para que podamos encontrar el rostro autentico del Padre, a pesar de lo agitado y ruidoso de nuestra cuidad.

“A ejemplo del buen pastor que no vino a ser servido sino a servir, muestren el amor y la misericordia de Dios en su propia vida, y organicen de tal modo las comunidades que se les confía, para que ahí encuentren auxilio eficaz, los más pobres y excluidos de la sociedad, y así descubran que Dios es amor”, señaló el Cardenal Rivera.

Durante la celebración eucarística se rezó la letanía de los santos, también se vivió un momento muy especial cuando todos los obispos participantes impusieron sus manos en la cabeza de los consagrados; de igual manera se les ungió la cabeza, lo que simboliza la unión con el Espíritu Santo. Posteriormente los nuevos obispos recibieron las insignias episcopales, como son el evangelio, el anillo, la mitra, la cruz pectoral y el báculo pastoral; después el Cardenal los llevó a la Sede, en donde ellos se sentaron por primera vez como Obispos. Entre aplausos y porras, el pueblo de Dios recibió a sus dos nuevos Obispos Auxiliares.

Mons. Andrés Vargas Peña, de 64 años de edad, es originario de San Luis Potosí, fue ordenado sacerdote en 1973 y estudió la licenciatura en Filosofía en la Universidad gregoriana de Roma. Ha ejercido su ministerio sacerdotal como profesor y director espiritual del Seminario Mayor de San Luis Potosí, además de ser párroco y subdirector de la Escuela Arquidiocesana de Teología para los Laicos.

Mons. Adolfo Miguel Fonseca nació en 1962 en San Mateo Mozoquilpan, Estado de México; fue ordenado sacerdote en 1987, en Toluca. Es Lic. en Sagradas Escritura por parte de la Universidad Pontificia de México. Obtuvo un doctorado en Teología en el Instituto Pontificio Bíblico de Roma.




Eucaristía es el don más grande dejado por Cristo, recuerda el Papa Benedicto XVI

Al presidir la Audiencia General del miércoles 4 de agosto, en medio de un gran ambiente de fiesta y ante una multitud de fieles entre los que se encontraban más de 60 mil monaguillos provenientes de diversos países de Europa, el Papa Benedicto XVI explicó a través del testimonio del joven mártir San Tarcisio, que la "Eucaristía es el don más grande que Jesús nos ha dejado".

El Santo Padre manifestó, cómo la vida del patrono de los monaguillos, San Tarcisio, es un ejemplo y un llamado para quienes ayudan en Misa y "para quienes desean seguir a Jesús más de cerca a través de la vida sacerdotal, religiosa y misionera".

"Que todos puedan mirar a este joven valiente y fuerte y renovar así el esfuerzo por la amistad con el Señor mismo para aprender a vivir siempre con Él siguiendo el camino que nos indica con su Palabra y el testimonio de tantos santos y mártires, de los cuales, por medio del Bautismo, nos convirtamos en hermanos y hermanas", añadió.

Durante su reflexión, el Pontífice relató cómo San Tarcisio entregó su vida por defender la Eucaristía que llevaba, a su corta edad, aferrada a su pecho para quienes la esperaban, antes que dejar que fuera desacralizada por un grupo de jóvenes paganos que lo golpearon hasta morir. "Moriré antes que entregarla", le había prometido al sacerdote que finalmente había aceptado que el pequeño cristiano portase el Cuerpo de Cristo.

"El testimonio de San Tarcisio y esta bella tradición nos enseñan el profundo amor y la gran veneración que debemos tener hacia la Eucaristía: es un bien precioso, un tesoro cuyo valor no se puede medir, es el Pan de la vida, es Jesús mismo que se hace alimento, apoyo y fuerza para nuestro camino de cada día y camino abierto hacia la vida eterna, es el don más grande que Jesús nos ha dejado", señaló el sucesor de Pedro.

Luego de comentar que "probablemente a nosotros no se nos pide el martirio", el Señor si anima a vivir "la fidelidad en las pequeñas cosas, en el recogimiento interior, la participación interior, nuestra fe y el esfuerzo por hacer presente este tesoro en la vida de cada día".

El Papa concluyó con su saludo en español, en el cual deseó "que el ejemplo de San Tarcisio, cuya imagen podéis contemplar aquí, os ayude a todos a tratar con creciente amor y veneración a Cristo, que en el Santísimo Sacramento se entrega por nosotros, y nos alimenta y sostiene en nuestro camino hacia la patria definitiva".



Papa alienta a actuar con fidelidad a Cristo

El pasado 3 de agosto, el Secretario de Estado Vaticano, Cardenal Tarcisio Bertone, en representación del Papa Benedicto XVI, envió una carta a los Caballeros de Colón, quienes estaban reunidos en su convención anual.

En el texto, el Santo Padre les recordó que la mejor respuesta a los ataques contra la Iglesia es una mayor fidelidad a Cristo, a través de las organizaciones fraternas, que son un ejemplo de lealtad a la Iglesia Católica.

En la misiva leída durante la primera sesión de la 128° Convención Suprema de los Caballeros de Colón, el Cardenal Bertone declaró que "ante los frecuentes e injustos ataques contra la Iglesia y sus líderes, Su Santidad está convencido de que la respuesta más efectiva es una mayor fidelidad a la palabra de Dios, un mayor esfuerzo por la santidad y un creciente compromiso en la caridad en la verdad de parte de todos los fieles".

En el mensaje, el Pontífice "pide a los Caballeros perseverar en su testimonio de fe y caridad, en la confianza serena de que, mientras la Iglesia abraza este periodo de purificación, su luz brillará más radiante ante los hombres y mujeres justos y de buena voluntad".

El Cardenal Bertone agregó que el sucesor de Pedro aseguró que "en un tiempo en el que las normas morales fundamentales, basadas en la verdad e inscritas en el corazón humano son cuestionadas y enfrentadas por la legislación", se encuentra "agradecido por los esfuerzos hechos por los Caballeros, en cooperación con otros hombres y mujeres de buena voluntad, para defender la razonabilidad de las enseñanzas morales de la Iglesia en pro de un orden social justo y duradero".

En la carta dirigida al Caballero Supremo Carl Anderson, el Secretario de Estado concluye destacando que el Santo Padre "agradece una vez más a su orden por testimoniar la santidad de la vida humana y la auténtica naturaleza del matrimonio, así como por sus esfuerzos para promover en el laicado católico una mayor conciencia de la necesidad de superar cualquier separación entre la que se profesa, y las decisiones diarias que modelan nuestras vidas como individuos y en la vida de la sociedad como conjunto".


Cardenal Cipriani invita a aprender a dialogar

Este 2 de agosto, en su programa radiofónico “Diálogo de Fe”, el Arzobispo de Lima y Primado del Perú, Cardenal Juan Luis Cipriani Thorne, tras alentar a los educadores a formar a los jóvenes en los valores morales, manifestó que últimamente ha sido víctima de insultos, y por eso exhorta a la ciudadanía a aprender a dialogar y discrepar con la verdad. En su reflexión, el Cardenal recordó que la Iglesia Católica es una institución que está a favor de la libertad de pensamiento y se funda en la verdad.

"No hay que decir que la Iglesia es como una nube que está en el aire. No podemos cuestionar que en la Iglesia hay normas como en toda institución. Lo que más maltrata la libertad de pensamiento es la libertad del pecado, el hombre soberbio y lujurioso tiene una venda en los ojos, porque su soberbia le lleva a pensar que tiene la razón en todo y te echa a ti la basura que tiene él", señaló.

"Yo expongo lo que la Iglesia me enseña y otros pueden estar en desacuerdo. Déjame ofrecerte la alternativa para que esta juventud se forme mejor", precisó para después añadir que "está faltando una fuerza en los valores, en la dimensión de respeto a los demás. Algunas personas dicen que discrepan y tiene otros puntos de vista, pero no es necesario insultar, descartar a las persona".

"Debemos afirmar la conveniencia de un diálogo sobre la verdad, si cada uno dice solamente lo que le provoca sin ningún sustento, es un diálogo en que todos pueden decir algo, pero como en el circo, a la juventud convienen ayudarlos a que esos ideales tengan el recuerdo de cómo se ha forjado el país", concluyó el Cardenal Cipriani.



Perú realiza congreso sobre Sábana Santa

El Centro de Estudios Católicos de Lima y Acción Universitaria, realizarán del 31 de agosto al 2 de septiembre de 2010, el 2° Congreso Internacional de la Sábana Santa, para ello, contarán con la participación de diversos expertos en el tema del Manto Sagrado.

Entre los invitados al evento, está el Dr. Bruno Barberis, profesor asociado de física matemática de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Turín, quien es Director del Centro Internacional de Sindonología de Turín desde el 2002.

También se presentará el connotado sacerdote jesuita Manuel Carreira, doctor en Física, filósofo y teólogo, quien además es miembro del Observatorio Astronómico del Vaticano, y profesor en universidades de Estados Unidos y España. Completa el panel de especialistas el Licenciado Rafael de la Piedra, teólogo y estudioso de la Sábana Santa.

Los organizadores han informado que además del congreso, se "realizará una jornada especial para religiosos, sesiones especiales para profesores y estudiantes de colegio, y una gran exposición temática sobre la Sábana Santa que contempla la historia, los diversos estudios realizados, las teorías de la formación de la imagen, como unas reproducciones fotográficas al tamaño natural, en positivo y negativo, del manto que se encuentra en Turín".

El Congreso que se realiza por quinta ocasión, se llevará a cabo en la Universidad de Lima, quien auspicia el evento junto con el Arzobispado de esta capital.



San Ignacio de Loyola continúa siendo ejemplo de santidad

El Obispo de San Sebastián, Mons. Ignacio Munilla, afirmó el pasado 1 de agosto, que el testimonio dejado por San Ignacio de Loyola sigue vigente y con ello, llamó a los fieles a buscar la santidad, porque es el camino que el Señor les invita a seguir, pues todo camino que no sea en respuesta a la llamada de Dios, "habrá sido inútil y baldío, y no dejará ninguna huella beneficiosa para la posteridad".

"El modelo de San Ignacio es verdaderamente necesario para la vida de la Iglesia Católica de nuestros días. Más aún, me atrevería a decir que es indispensable, para que no sucumbamos a la tentación del relativismo reinante y de nuestra propia subjetividad. El carisma ignaciano nos preserva de la tentación de crear un dios a nuestra medida, así como una religión a la carta", afirmó durante la Misa por la fiesta del fundador de la Compañía de Jesús.

El Prelado añadió que la Iglesia sigue proponiendo su vida como modelo; pues "el Señor lo ha elegido como un instrumento suyo, para ayudarnos a descubrir y a discernir la voluntad de Dios en nuestra vida; para que ‘acertemos’ a dar con ese camino concreto que Dios tiene pensado para cada uno de nosotros, y que será el que nos lleve a la santidad".

Tras recordar la conversión de San Ignacio, Mons. Munilla manifestó que su vida y espiritualidad introducen a los fieles "en una verdadera escuela de discernimiento: no es lo mismo desear que querer, no es lo mismo soñar que discernir, no es lo mismo ilusionarse que perseverar, no es lo mismo hablar que hacer, no es lo mismo querer que poner los medios; en definitiva, no podemos dar por buenas nuestras sensibilidades e ideologías, sin cuestionarnos antes si se adecuan al querer de Dios".

El Obispo de San Sebastián concluyó señalando que con su testimonio, San Ignacio enseñó que "lo verdaderamente importante es la santidad, la búsqueda de Dios, el deseo de cumplir su voluntad… Hoy en día, bajo el influjo de una mentalidad practicista, tendemos a pensar que la santidad no es rentable y que no tiene futuro. Sin embargo, la realidad es bien distinta".

Iglesia mexicana actuará ante cambio climático

La Iglesia Católica en nuestro país, ha informado que se encuentra preocupada por los desafíos que representa el cambio climático, y por ello busca fortalecer e impulsar a la Pastoral Social para afrontar esta problemática mundial.

Como parte de la búsqueda de soluciones, se llevará a cabo del 9 al 13 de agosto, el Encuentro de Pastoral Social en la casa Sede de la Conferencia del Episcopado Mexicano, en Cuautitlán Izcalli, Estado de México, cuyo tema central “El Cambio Climático”, ya que en este año se han puesto como objetivo, el “fortalecer e impulsar, en el horizonte de la Misión Continental, la Pastoral Social de nuestra Iglesia, para que de manera estructurada, orgánica e integral, responda a los desafíos que el cambio climático presenta a la misión de la Iglesia para la vida digna de nuestro pueblo”.

El P. Armando Flores Navarro, secretario ejecutivo de la Comisión de Pastoral Social de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), explicó que existe gran preocupación en la Iglesia Católica por el tema ambiental, y por eso se buscará animar a todas la diócesis del país para que implementen trabajos en ese sentido, además indicó que la Doctrina Social de la Iglesia incluye varios pronunciamientos sobre el tema, como el que hizo el Papa Juan Pablo II durante la Jornada Mundial de la Paz, celebrada en 1990.

El P. Flores Navarro compartió que el Papa Benedicto XVI también ha hecho declaraciones sobre la problemática del cambio climático, y un ejemplo de ello, es su última encíclica, porque en ella asegura que a la Iglesia le preocupan “todos los temas que afectan las condiciones de vida digna del hombre”. Más adelante agregó que la acción que están impulsando, forma parte de lo que establece el documento final de Aparecida.

El mensaje concluyó señalando que al encuentro están convocados los responsables de grupos a nivel nacional, organizaciones laicales e institutos de vida consagrada, para que ellos compartan sus experiencias y esfuerzos por la conservación del medio ambiente. Además asistirán expertos, quienes brindarán un panorama más amplio de la situación, con la finalidad de fortalecer e incorporar programas pastorales encaminados a prevenir y disminuir el impacto del cambio climático en el país.

Clero recuerda a su patrono el Cura de Ars

El pasado lunes 2 de agosto, durante la fiesta patronal del clero, celebrada en el Seminario Menor de la Arquidiócesis de México, el Cardenal Norberto Rivera Carrera declaró que “Dios sigue creyendo” en los ministros religiosos “a pesar de lo que nosotros somos”.

Como parte del festejo al que asistieron diversos sacerdotes de toda la ciudad, quienes recordaron la figura de su santo patrono San Juan María Vianey, compartieron sus testimonios, lo que les permitió reflexionar sobre las diferentes experiencias del ministerio al que Dios les convocó.

El P. Martín Jaramillo, comisionado para el Clero, manifestó resulta importante escuchar el testimonios de sacerdotes mayores, puesto que alientan al clero joven y a la feligresía, ya que “la figura del sacerdote fue muy atacada últimamente, pero escuchando estos testimonios podemos sentir orgullo de los sacerdotes que han desgastado su vida en el servicio al Señor”.

Antes de concluir el evento y de que el Cardenal entregara un reconocimiento a todos los sacerdotes que tienen entre 25 y 50 años de entregar su vida al pueblo de Dios, el P. Benito Ríos deseó dar testimonio de una vida llamada “desde el misterio de Cristo, surge de Dios, fuimos llamados desde la eternidad”.

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