Durante el rezo del Ángelus dominical, el pasado 9 de octubre el Papa Benedicto XVI pidió tomar ejemplo de los santos de para renovar el mundo.
Durante su 25º visita pastoral dentro de Italia, el Pontífice viajó a la región calabresa de Lamezia Terme y Serra San Bruno bajo el lema “En nombre de Jesucristo, el Nazareno, ¡camina!”, ahí, ante miles de fieles, recordó que “¡la fe de los santos renueva el mundo! Con la misma fe, también vosotros, ¡renovad hoy vuestra amada Calabria!”.
Seguidamente, invitó a renovar la fe en la oración constante a la Virgen María, “a la luz de las enseñanzas del Concilio Vaticano II, de la Sede Apostólica y de vuestros pastores”. Luego, animó a los fieles de Calabria, región al sur de Italia, que ha sido de las más azotadas por la mafia, la violencia, el crimen y la desocupación, a confiar en María, para que vuestra comunidad diocesana “camine unida en la fe, en la esperanza y en la caridad. Os ayuda la Madre de la Iglesia a tener siempre en el corazón la comunión eclesial y el compromiso misionero”.
“Dirijámonos con filial devoción a la Virgen María, que en este mes de octubre veneramos en particular con el título de Reina del Santo Rosario”, pidió el Santo Padre, exhortando además a invocar “la intercesión de María también por los problemas sociales más graves de este territorio y de toda Calabria, especialmente el laboral, de la juventud y de la protección de las personas discapacitadas, que requieren una mayor atención de parte de todos, en particular de las instituciones”.
Al concluir, el Papa destacó: “En comunión con vuestros obispos, os animo en particular a vosotros, fieles laicos, a no hacer faltar vuestra contribución de competencia y de responsabilidad para la construcción del bien común”.
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